Jubilaciones ilustres

Autora: María José Collado

El pasado viernes 13 de diciembre, los miembros del Claustro del IES Jorge Guillén y algunos antiguos compañeros y allegados, compartimos una suculenta comida en el Rte. Cueva de Nerja, con el fin de celebrar la jubilación de dos compañeros que han escrito parte de la historia de nuestro centro: Ignacio Marín y Alberto Blay.

Ignacio Marín llegó al instituto en el curso 1989-1990 con destino definitivo. Ha sido Jefe del Departamento de Francés a lo largo de estos años, excepto cuando ha detentado el cargo de Director del Centro, que fue durante el curso 1990-1991 y desde el curso 2004-2005 hasta el pasado 2012-2013.

Como bien dijo nuestro actual director, José Aranda, en el simpático discurso que pronunció en dicha comida, su trayectoria profesional ha estado marcada por su sentido del deber manifiesto en la asistencia a su puesto de trabajo incluso en los momentos personales más complicados. Ignacio ha representado a esos profesores de sólida formación, vasta cultura y un carisma que le convirtió en el líder de los directores de la zona.

Alberto Blay llegó al instituto en el curso 1995-1996 con destino definitivo por permuta. Desde entonces y hasta el curso 2004-2005 ha sido el Jefe del Departamento de Dibujo. A partir del citado curso, ha formado parte del Equipo Directivo liderado por Ignacio, detentando los cargos de Vicedirector, primero, y Secretario hasta la fecha de su jubilación, el pasado 18 de noviembre.

Licenciado en Arquitectura, especialista en Dibujo Técnico, ha sido el profesor con mayúscula en esta especialidad. Dinámico, comprensivo, tolerante y un gran sentido de la elegancia y el saber estar. Ha participado activamente en todas las actividades que se han celebrado en el centro, sorprendiéndonos siempre por su originalidad y buen gusto. Amante de las tertulias, aunque siempre ha preferido escuchar. Cada día “al pie del cañón”, ha cumplido jornadas laborales de primera a última hora, lo que explica por qué la Secretaría ha funcionado tan bien.

Dos compañeros que han dejado una huella imborrable en el IES Jorge Guillén. Ellos y otros muchos son los que hacen que este sea un lugar donde el trabajo se realiza con placer y donde muchos pasamos más horas de las estrictamente necesarias solo por el gusto de compartir momentos de confidencias, de diversión y, en definitiva, de amistad.